Respetado Profesor Valenverg, espero que lea mi carta, necesito su sabio consejo.
En estos tres últimos meses, algunos politiqueros han cogido mi nombre de colchón, para insultar, despotricar, calumniar y difamar a sus contrincantes…
Escudándose en mí desgracia, se han proclamado “Zares” anticorrupción, sabiendo que tienen un pasado oscuro. Mejor dicho, como dice la canción vallenata: “El hombre que está más sucio que un rancho solo, se viene a limpiar las uñas con mi honradez…”.
Una zarina, insultó, despotricó, calumnió a los que le ganaban por paliza y después se retiró, argumentando falta de garantías, pobrecita, ahora le salimos a deber.
Otro, no baja de malandrines, corruptos y bandidos a todos los que le van ganando, pero hace alianzas maquiavélicas con otros personajes cuestionados.
Ya no aguanto más profesos, qué hago, ayúdeme, deme su sabio consejo.
Respuesta:
Querida “Cartagena” …
No se preocupe, que este domingo 27 terminará su sufrimiento.
Entiendo por lo que está pasando. Lobos malandrines disfrazados de ovejas, diciendo que acabarán con las ratas, la están asechando, para terminar con lo poco que queda de usted.
No se preocupe que la gente sabe que usted necesita una persona preparada, con amplio conocimiento de la administración pública y no como dicen popularmente, boquisucios.
Por otra parte, no le tema a la experta en harina, cañones coloniales y millonarias pensiones, que la gente sabe muy bien quién es y lo que pretende, al intentar que la sigan como borregos al matadero.
Mi querida Cartagena, el domingo usted va a salir fortalecida, porque el pueblo así lo quiere.
Su amigo
Profesor Valenverg
Politólogo, sexólogo, influenciador, sicólogo, clarividente, mentalista, forista, a veces taxista, penalista, pero sobre todo consejero. Graduado en la Universidad de la Vida.
VIRANSEN…