En julio las ventas del comercio colombiano tuvieron un desempeño aceptable, como quiera que un porcentaje creciente de empresarios reportó una actividad con igual o mejor dinámica que hace un año. En efecto, para el 43% de los consultados por FENALCO, las cantidades físicas vendidas en julio fueron más altas que en igual mes del año pasado, un 36% dijo que el nivel fue muy similar y el 21% consideró que hubo disminución.
En julio hubo buen reporte de ventas de bebidas de todo tipo, no sólo en el retail sino a nivel de comercio tradicional, según reportes de distribuidores mayoristas. No deja de sorprender que entre los empresarios que en mayor medida reportaron buen movimiento de sus cajas registradoras en julio figuran los vinculados al sector de bienes de consumo durable o semidurable como los vehículos, motocicletas, bicicletas (¿fiebre de Egan?), teléfonos celulares, equipo electrónico, artículos para la remodelación del hogar y productos de cuero y calzado en general.
Este comportamiento contrasta con los resultados negativos que arroja el Índice de Confianza del Consumidor que calcula mensualmente Fedesarrollo. Habitualmente, estos bienes se adquieren con recursos del crédito y, en efecto, los registros de la Superfinanciera muestran que en este año el crédito de consumo se comporta relativamente bien, en contraste con el crédito a empresas. Es evidente, entonces, una disonancia entre la confianza del consumidor y el comportamiento de los consumos. De otro lado, las expectativas de ventas para los próximos seis meses se mantuvieron estables.