EDITORIAL
JUAN CARLOS CERON
Cada que llega una época electoral, aparecen como “Genios guardados en lámparas”, los encuestadores chimbos.
No son otros, que los que no tienen ningún respaldo legal y sin embargo, se atreven a ser encuestadores. Pero con una particularidad. Depende el billete liderará la encuesta, quedará en segundo o tercer lugar o simplemente no aparecerá.
Nadie se explica, como en las encuestas realizadas por empresas encuestadoras serias a nivel nacional, aparecen por ejemplo 5 políticos que lideran la preferencia electoral, para la Alcaldía de Cartagena, sin embargó, en las «encuestas» locales chimbas, aparece punteando un perfecto desconocido o un politiquero de pacotilla de los que siempre se lanzan pero que nunca llegan al final de las elecciones.
No es un secreto, en Cartagena se hacen encuestas desde 200. 300 o 500 mil pesos. ¿Quiere quedar de primero? Pues eso le vale 2 millones de pesos. Así se maneja.
La segunda parte de hacer las encuestas chimbas es regarlas por toda la ciudad. Como no pueden acudir a los medios de comunicación –portales, emisoras, canales de tv o prensa- pegan carteles por toda la ciudad o riegan volantes con los resultados chimbos a diestra y siniestra.
Pero no solo pretendes estos encuestadores chimbos, confundir a la ciudadanía, quieren acabar con la ciudad.
Hacen un contubernio diabólico para confundir a los incautos electores. Se burlan de frente de las autoridades y llenan sus bolsillos con dinero mal habido.
No se dejen confundir. Cuando vean una encuesta, verifiquen quién es el encuestador, qué calificación tiene y después si analice los resultados.
NO crea en las encuestas chimbas que pegan en las paredes, personas inescrupulosas que quieren confundir para reinar.
El llamado también es para las autoridades ¿hasta cuándo van a permitir que estos encuestadores chimbos acaban con el proceso electoral en Cartagena.
Recuerden que así como es el desayuno, se sabrá cómo es el almuerzo. Imagínese lo que hará un politiquero que se atreve a pagar para puntear una encuesta chimba.